Una mirada al pasado (bueno, otra más)

Repasando un recopilatorio que publicó el Jueves en su 25 aniversario, he podido comprobar que la historia, en cierta manera, es cíclica, o al menos, si no se recuerdan los errores cometidos, estos están condenados a repetirse. Y además, he podido ver que en los periódicos, igual que ahora, hay predicciones que nunca se cumplen. Por ejemplo:

• Año 1977: la Iglesia pone el grito en el cielo por el tema de la educación, y es que según el cardenal Tarancón, “el Gobierno tiene el deber ineludible de respetar la libertad religiosa y el derecho de los padres”. Vaya, ese argumento me es familiar, a cuenta de la artificial polémica surgida con la “Educación por la ciudadanía” hace nada.
• Año 1978: El Jueves saca en portada la nueva programación de TVE, dibujando la tele como un ladrillo. Treinta años después sigue siendo igual de ladrillo, pero hay más ladrillos distintos para elegir...
• Año 1979: Titular tras la victoria de Suárez en las primeras elecciones democráticas: “Fraga medita su retirada”. Lleva casi tres décadas meditando el hombre...
• Año 1980: No sé como estaría el tema entonces, pero titulaban en portada los del jueves, a cuenta del turismo: “Se nos muere la vaca de los huevos de oro”. Esta vaca debe ser pariente cercana de Fraga: igual de longeva, y con los mismos andares...
• Año 1983: “Guerra de banderas en el País Vasco”, titula el jueves en septiembre de este año. Y también seguimos con la misma historia, 24 años después (que se dice pronto).
• Año 1991: Jesús Gil es elegido alcalde de Marbella. Años después, terminaría en la cárcel e inhabilitado para ocupar cargos públicos, después de ocho años de mangonear la alcaldía. Lo curioso del caso, es que si no hubiera sido por que Ramón Mendoza, el que fuera presidente del Real Madrid, le retiró una querella por la que ya entonces estaba inhabilitado para ocupar dichos cargos públicos, eso jamás hubiera ocurrido...
  

  

Menos mal que dicen que no hay mal que cien años dure (o eso espero).

PD: si al final con la ley de memoria histórica se obliga a quitar de los edificios públicos, instituciones y demás los símbolos franquistas, tal vez deberían empezar por el propio Fraga, ¿no?