El pasado domingo terminaba el mundial de Fórmula 1, y vaya si lo hizo de forma emocionante. Ni el mejor de los guionistas de los Serrano hubiera conseguido un final más apasionante, aunque todo hubiera sido un sueño. El caso es que con esta retransmisión se acaba la Fórmula 1 en Telahínco (lo que no significa que el calvo deje de ir detrás de "cuello-toro" Alonso, ni mucho menos), y como previo a la carrera se clavaron un publirreportaje de 2 horas glosando las maravillas de Lobato, el gordo y cía... ¡Casi nada! Que mejor forma de celebrar "la renuncia voluntaria a adquirir los derechos de retransmisión de la fórmula 1" (Basile dixit), sobre todo después de una carrera que vieron casi 7 millones de telespectadores, ¡y eso que Alonso no se jugaba nada!
Como para ciertas cosas los ingleses nos ganan por experiencia y saber hacer, la ITV, cadena de televisión inglesa que se encontraba en la misma situación que Telahínco (también ha perdido los derechos de retransmisión del circo automovilístico por excelencia) se curró, supongo que entre otras cosas, un videoclip en el que repasaba sus 12 años de retransmisiones, contando, eso sí, con la colaboración de un montón de gente del mundillo: desde el "innombrable" (para muchos forofos españoles) Hamilton -e hijo!!!!!- a ingenieros y directores de equipos, pasando por un buen puñado de pilotos, y combinando con gran maestría algunas de las imágenes más impactantes de la última década de Fórmula 1 con música de "My Chemical Romance". A mí, he de reconocer que me llega a emocionar el vídeo.
Y es que cuando se hacen las cosas bien...
PD: Quien os diga que Timo Glock se dejó adelantar en esa última vuelta, como se puede leer una y otra vez en algunos sitios, que se lo haga mirar.
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